Pero es que la otra no es rumana a secas, sino rumana-alemana. No tengo el gusto, simultáneamente a usía. Pero constaté algo hace tiempo: muchas cosas traducidas del español al alemán pasan de guarras a cursis (qué decepción para el solitario), y de vulgares a acontecimiento literario. ¿Quien será el traductor? Pero todo esto ya no tiene nada que ver con las escritoras rumanas y ni sé a que viene a cuento.
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Pero es que la otra no es rumana a secas, sino rumana-alemana. No tengo el gusto, simultáneamente a usía. Pero constaté algo hace tiempo: muchas cosas traducidas del español al alemán pasan de guarras a cursis (qué decepción para el solitario), y de vulgares a acontecimiento literario. ¿Quien será el traductor? Pero todo esto ya no tiene nada que ver con las escritoras rumanas y ni sé a que viene a cuento.
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